Star Wars El imperio contraataca (1980) - Irvin Keshner
Star Wars fue una explosión que marcó un antes y un después en la historia del cine, y lanzó al estrellato a George Lucas que pasó a formar parte de la gran camada de directores surgidos en la época de los 70: Brian De Palma, Steven Spielberg, Ridley Scott, Francis Ford Coppola,etc. Así que una secuela era inminente y aunque Lucas no la tenía preparada de antemano (porque creo que no esperaba semejante éxito), entonces tres años después de la primera parte, esta vez dirigida por Irvin Keshner saldría El Imperio Contraataca.
Lo que me encanta de esta película es que prácticamente creo el nuevo concepto que hoy varios usan en el cine, de hacer que las secuelas expandan más el universo que dejó planteada la primera parte, además de sumarle más oscuridad y dramatismo. Ya desde el vamos podemos ver de que este episodio va a ser diferente, debido a que vemos al pobre Luke Skywalker abandonado en la nieve, capturado por una criatura horrible al mismo tiempo que los rebeldes intentan esconderse como pueden de un inminente ataque imperial.
Y mientras que en la primer película todos estábamos convencidos de que todo iba a salir bien, aquí todo esta contagiado de un pesimismo indomable, aumentado la dosis drámatica hasta la máxima potencia. Ni hablar de la ESPECTACULAR secuencia del ataque de las naves imperiales al escondite rebelde de Hoth obligandolos a retirarse y dejar a Han Solo y Leia solos perseguidos por prácticamente todo el Imperio, situación que da lugar a dialogos descomunales en especial del maravilloso personaje interpretado por Harrison Ford. Parrafo aparte para Darth Vader, que se ve más atemorizarte que nunca convirtiendo sin ninguna duda en uno de los mejores villanos del cine.
Después de la batalla en Hoth, la película quedara dividida en dos tramas que lentamente se irian cruzando: la ya mencionada con Han y Leia acompañados por C3PO y Chewbacca, y la otra protagonizada por Luke y su excursión en Dagobah para buscar al único maestro Jedi vivo, Yoda. Difícil hablar de este colosal personaje, sabio y poderoso como él solo, es increíble el trabajo excepcional que se hizo con una simple marionetita y ni hablar de su forma de hablar al revés, sin duda espectacular.
Y es díficil ver a Luke, tan bien que lo habíamos dejado en la primer película, fracasar en su entrenamiento, ya que fue con demasiadas ansias y nada de paciencia, por lo cual casi ni es digno de poder usar la fuerza, la cual gracias a la forma de hablar de Yoda casi parece que la sintamos cuando el verde maestro habla sobre ella. Y lo mejor es que cuando justo Luke estaba aprendiendo a poder utilizarla, recibe una visión que lo alerta de que sus amigos Han y Leia están en peligro (atrapados por el Imperio en la Ciudad de las Nubes gracias a un amigo de Han, Lando), por lo que nuevamente pierde la paciencia y parte hacía el rescate de sus compañeros sin escuchar las advertencias de Obi-Wan en forma fantasma y de Yoda.
Y lo peor cuando vemos a Luke confrontándose a Darth Vader, es que sabemos que el villano le va a dar una paliza, en un duelo espectacular, largo, super realista (dejemos los estúpidos saltos de un lado a otro para la trilogía de precuelas) y para que entrar más en detalle de que tiene una espectacular música, una espectacular filmación y la espectacular frase final: "Yo soy tu padre" (si nunca dijiste esta frase, mentís porque seguro la dijiste alguna vez).
Y después de ver la película quedamos hechos polvos: Luke con la mano cortada y traumatizado por saber que Darth Vader es su padre y Han Solo congelado y capturado por un cazarecompensas que no dudaría en matarlo, eso sumado a la frase de Yoda de que hay otra persona que puede salvarlos de todo las personas en 1980 terminaron con la cabeza llena de preguntas y esperando ansiosamente una secuela.
Difícil agregar algo más a esta impresionante película, con incluso mejor actuaciones que su antecesora, con un trasfondo drámatico que se agradece y es simplemente, en mi opinión, la mejor de toda la saga.
Lo que me encanta de esta película es que prácticamente creo el nuevo concepto que hoy varios usan en el cine, de hacer que las secuelas expandan más el universo que dejó planteada la primera parte, además de sumarle más oscuridad y dramatismo. Ya desde el vamos podemos ver de que este episodio va a ser diferente, debido a que vemos al pobre Luke Skywalker abandonado en la nieve, capturado por una criatura horrible al mismo tiempo que los rebeldes intentan esconderse como pueden de un inminente ataque imperial.
Y mientras que en la primer película todos estábamos convencidos de que todo iba a salir bien, aquí todo esta contagiado de un pesimismo indomable, aumentado la dosis drámatica hasta la máxima potencia. Ni hablar de la ESPECTACULAR secuencia del ataque de las naves imperiales al escondite rebelde de Hoth obligandolos a retirarse y dejar a Han Solo y Leia solos perseguidos por prácticamente todo el Imperio, situación que da lugar a dialogos descomunales en especial del maravilloso personaje interpretado por Harrison Ford. Parrafo aparte para Darth Vader, que se ve más atemorizarte que nunca convirtiendo sin ninguna duda en uno de los mejores villanos del cine.
Después de la batalla en Hoth, la película quedara dividida en dos tramas que lentamente se irian cruzando: la ya mencionada con Han y Leia acompañados por C3PO y Chewbacca, y la otra protagonizada por Luke y su excursión en Dagobah para buscar al único maestro Jedi vivo, Yoda. Difícil hablar de este colosal personaje, sabio y poderoso como él solo, es increíble el trabajo excepcional que se hizo con una simple marionetita y ni hablar de su forma de hablar al revés, sin duda espectacular.
Y es díficil ver a Luke, tan bien que lo habíamos dejado en la primer película, fracasar en su entrenamiento, ya que fue con demasiadas ansias y nada de paciencia, por lo cual casi ni es digno de poder usar la fuerza, la cual gracias a la forma de hablar de Yoda casi parece que la sintamos cuando el verde maestro habla sobre ella. Y lo mejor es que cuando justo Luke estaba aprendiendo a poder utilizarla, recibe una visión que lo alerta de que sus amigos Han y Leia están en peligro (atrapados por el Imperio en la Ciudad de las Nubes gracias a un amigo de Han, Lando), por lo que nuevamente pierde la paciencia y parte hacía el rescate de sus compañeros sin escuchar las advertencias de Obi-Wan en forma fantasma y de Yoda.
Y lo peor cuando vemos a Luke confrontándose a Darth Vader, es que sabemos que el villano le va a dar una paliza, en un duelo espectacular, largo, super realista (dejemos los estúpidos saltos de un lado a otro para la trilogía de precuelas) y para que entrar más en detalle de que tiene una espectacular música, una espectacular filmación y la espectacular frase final: "Yo soy tu padre" (si nunca dijiste esta frase, mentís porque seguro la dijiste alguna vez).
Y después de ver la película quedamos hechos polvos: Luke con la mano cortada y traumatizado por saber que Darth Vader es su padre y Han Solo congelado y capturado por un cazarecompensas que no dudaría en matarlo, eso sumado a la frase de Yoda de que hay otra persona que puede salvarlos de todo las personas en 1980 terminaron con la cabeza llena de preguntas y esperando ansiosamente una secuela.
Difícil agregar algo más a esta impresionante película, con incluso mejor actuaciones que su antecesora, con un trasfondo drámatico que se agradece y es simplemente, en mi opinión, la mejor de toda la saga.
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